Cuando criaba a mis hijos leía sobre los beneficios del Yoga y siempre creía que eso estaba en las grandes ciudades , nunca me imaginaba que llegaría a mi pueblo una profesora que por entonces estaba en el extranjero tan competente y contagiosa de todo lo bueno de la vida.
Cuando terminamos la clase sales cargada de positividad que te sana y te renueva y si no tienes un buen momentos, te hace que lo los lleves mejor y lo veas de una manera diferente.
Muchas Gracias y no cambies nunca